La zona de inestabilidad sobre ambas partes de Centroamérica esta asociada a lo que fue un extenso giro centroamericano como explicamos ayer. Dicho giro se dividió en 2 vortices, el primero se movió al Pacífico y tiene muy altas probabilidades de convertirse en ciclón tropical.
El segundo se ubica sobre el Caribe, pero su interacción con tierra limitará su desarrollo.
Sin embargo, ambos sistemas se moverán al oeste propiciando lluvias torrenciales en la zona centro y norte de Centroamérica, ademas de incremento de la velocidad de los vientos en las zonas costeras.
Según el pronóstico WRF generado por el Servicio Meteorológico de INSIVUMEH, las lluvias serán intermitentes con acumulados importantes de la cadena volcánica hacia el sur.
Las lluvias podrían propiciar inundaciones, desbordamiento de ríos e incluso deslaves, por lo que es muy importante estar al tanto de los avisos que emitan las autoridades correspondientes.
Análisis: Juan Palma